"El joven que desea convertirse en un artista moderno se encuentra abocado a la siguiente disyuntiva: está obligado a tener éxito si quiere hacer de artista moderno; pero debe rehuirlo con todas sus fuerzas si quiere ser artista moderno. Dilema grave entre hacer y ser que obliga a decidir a quién se obecede, si a la representación del poder (Estado) que otorga el éxito, o a las fuerzas oscuras que lo controlan (masas), únicas capacitadas para conceder la oportuna indiferencia".
(...) "Un artista es aquel que pone en términos sensibles y accesibles una pregunta, no una respuesta".
Félix de Azúa, El aprendizaje de la decepción, Anagrama, Barcelona, 1996.
FOTO: Calavera de platino y diamantes de Damien Hirst, titulada "Por el amor de Dios". Valorada en 18millones de euros.